¿ES NECESARIO ESTE TIPO DE PORTADAS

PARA LA VENTA DE PERIÓDICOS?

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¿Que es el sensacionalismo? ¿Realmente sabemos diferenciar la noticia de alcance generalista de la informacion "morbosa" que aparece publicado día si día no en periódicos de alcance nacional?

El único objetivo de dichas publicaciones es la venta de ejemplares para enriquecer sus bolsillos sin mirar mas allá de aquello que está delante de sus ojos. Gran parte de esta culpa la tienen los Gobiernos que permiten dichas divulgaciones, que en el fondo les interesa para que vivamos bajo esa preocupación, bajo ese miedo que permita tener a las sociedades controladas justificando todas sus actuaciones por el bien de la comunidad.

Cuando les interesa actuan de oficio y prohiben portadas como la de la revista "el jueves" que difundió una infografía del principe Felipe y de doña Leticia en una postura un tanto copuladora como la que ven a continuación.

Pero cuando no les interesa se hacen los suecos y conceden esas "licencias" permisivas para que cualquier periódico difunda de manera libre las fotografias mas escandalosas, aumentando así de forma notable la venta de ejemplares.

Teóricamente las portadas sensacionalistas no son censurables ya que no vivimos en una dictadura que limita la libertad de expresión, pero si existe ese resquicio de libertad que sea para todos por igual y que cada cual decida con cual se siente más identificado.

Pero todos sabemos que a la sociedad lo que le interesa es el morbo de ahí que existan programas televisivos como "Gran Hermano" o "Supervivientes" que tienen grandes cuotas de pantalla debido a la sociedad "cotilla" y "retorcida" en la que vivimos.

¿Quién tiene la culpa?

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¡Hola! Hay un tema que me preocupa, y no sé cómo la sociedad lo permite y premia a quien lo hace.

¿Qué precio debe pagar la información por estar en la portada de un periódico? Parece una pregunta ridícula, pues la información, evidentemente, no puede aportar una suma económica por aparecer en el lugar que le corresponde. Entonces, ¿a qué nos referimos? 

El hecho de mostrar imágenes sensacionalistas o impactantes en la portada de un periódico aumenta el volumen de ventas del mismo. Puede que hagan referencia a la noticia informativa más importante del día (verbigracia, si hablamos de atentados terroristas, accidentes de avión o fenómenos que han provocado la muerte de varias personas) pero... ¿es moral o ético que muestren para ilustrarlo imágenes escabrosas?

(foto aparecida en elmundo.es 03/05/2008)

Aquí tenemos una imagen de Gorka Landaburu tras sufrir un atentado de ETA. Apareció en elmundo.es (enlace) y sirve para ilustrar una noticia cuyo título es: "Reporteros Sin Fronteras denuncia las intimidaciones de ETA a la prensa española". La imagen, a pesar de tener relación con la noticia que ilustra, no representa el resto de la información; además, es una imagen de archivo captada 7 años antes de la noticia. Pero el hecho de que aparezca en el portal de la web, hace que los internautas pinchen para conocer el resto de la información.

Los medios de comunicación se aprovechan del morbo y del sensacionalismo para conseguir mayores beneficios y mayor protagonismo. ¿Toda la culpa es suya? ¿Acaso los ciudadanos no tienen curiosidad por conocer los asuntos más turbios y escabrosos que acaecen en la sociedad? ¿No es cierto que una gran parte de la población deja de lado la información veraz para centrarse en el morbo y la farándula?

Un ejemplo que puede dar respuesta a estas últimas preguntas es el caso de "La otra Italia", un espacio político de la televisión italiana que supera a "Gran Hermano" en cuota de pantalla. Según Lucía Magi demuestra que los espectadores no son una masa narcotizada por los muslos desnudos y los besos robados de los reality o los gritos de las tertulias. Un oasis de información en el desierto del sensacionalismo, en la capital del morbo, presidida por uno de los mayores caciques de la información.

¡Espero tu llamada!

El sensacionalismo como forma de vender más ejemplares

CADA DÍA VEMOS Y CONSUMIMOS DECENAS DE INFORMACIONES DE CORTE SENSACIONALISTA

(Foto: 11-M en laprovincia.es)

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Una imagen llamativa, impactante. Un cuerpo mutilado, heridas, llantos, gente sufriendo, catástrofes. Todo vale. ¿Objetivo? Vender más ejemplares, captar más audiencia, llamar la atención.

Vivimos rodeados de fotografías escalofriantes, de imágenes violentas en los telediarios, y lejos de causarnos un fuerte trauma, despiertan más interés por la noticia. Generan una especie de atracción que nos invita a seguir leyendo, a seguir viendo y escuchando. Pero no se trata de un interés que nos conciencie, que nos haga darnos cuenta de lo cruel y crudo que es este mundo que habitamos, no.

Se trata de un interés en el que lo más que expresamos es lástima, pena, o rabia momentánea. Sí, momentánea. Vemos crudas noticias, miramos, atendemos (si es que procede), y seguimos comiendo. Nuestras vidas no cambian por lo que vemos, por lo que podamos sentir recibiendo este tipo de información.

(Conflictos en Oriente Próximo, retratados por elmundo.es)

Entonces, ¿para qué las publicamos? Porque generan consumo, morbo, y "conversación en el bar". Dan que hablar, pero nada más. Los escrúpulos de los medios se ven desplazados (si es que existieron en algún momento) para poder generar más beneficios.

Como contrapunto, no obstante, se puede decir que muchísimas veces saltan noticias de conflictos bélicos o "relaciones poco diplomáticas" entre grupos sociales o estados que no alcanzan un elevado grado de credibilidad hasta que no son apoyadas con crudas imágenes. Es un ejemplo que se ve muy bien reflejado en la película Hotel Rwanda, del director Irlandés Terry George. En esta película se retrata de forma bastante exhaustiva los hechos violentos vividos entre los "hutu" y los "tutsi" en la guerra civil de Ruanda, en el año 1994.

(Cartel del film Hotel Rwanda)

Pero esto no se restringe al consumo de los grandes medios de difusión, y a las empresas de información competentes. Blogs, fotógrafos freelance, o incluso ciudadanos desvinculados de la "información profesional" generan este tipo de productos para su propio consumo, o una menor difusión (en principio), pero que con el tiempo pueden llegar a tener un alcance mayor.

Como ejemplo de medio de difusión alternativo a los de las grandes audiencias, encontramos Nothing Toxic. Se trata de una página web dedicada a la publicación de vídeos violentos, sangrientos, desagradables, y que, para resumir, no son aceptados en otro tipo de webs más "políticamente correctas".

De todos modos, en España nos podemos considerar "casi afortunados", ya que no tenemos medios "puramente sensacionalistas", ya que los kioscos de lugares como Francia o Reino Unido se nutren de muchísima prensa amarillista.

Pregunta: ¿Te parece ético el sensacionalismo? ¿Es, al menos, útil?

Espero tu llamada.